Ya estamos cansados de saber cómo la inteligencia artificial está cambiando la manera en que interactuamos con el mundo, especialmente en lo que respecta al trabajo. Muchos la ven como una herramienta para optimizar tareas simples, mientras que otros la utilizan más de lo que deberían, comprometiendo su capacidad creativa. La realidad es que ahora es más fácil investigar sobre un tema gracias a la aparición de los chats de IA y al AI overview de Google, que básicamente responde a la pregunta de los usuarios al instante, eliminando la necesidad de hacer clic en un sitio para obtener la información.
Aunque aparece en alrededor del 30% de las búsquedas, su frecuencia aumenta aún más (74%) cuando el usuario busca la resolución de problemas más complejos, según datos revelados por Search Engine Journal.
El AI overview se resume en la unión entre la inteligencia artificial generativa y el mayor motor de búsqueda en la web, Google. Se basa en diversas fuentes de contenido para dar una respuesta resumida y objetiva, además de mostrar el origen de esa información.
El resultado aparece en la parte superior de la página, por encima de cualquier sitio, incluso si este ha trabajado arduamente para posicionarse en la parte superior del ranking de la SERP, la página de resultados de Google.
Esto puede ser tanto una oportunidad como una barrera para los sitios que dependen del tráfico orgánico. Es una oportunidad para aquellos que estructuran un contenido que sea mencionado como fuente por el resumen de IA. Y es una barrera para los editores que, aunque están posicionados en la primera página de Google, no llegaron a tiempo para responder la pregunta del usuario antes de la herramienta.
Por lo tanto, la nueva dinámica de mostrar resultados impacta directamente la visibilidad del usuario, que puede conformarse con la respuesta generada por el resumen de IA (lo cual es más común en preguntas simples) o puede hacer clic en alguna de las fuentes indicadas por Google.
Como puedes ver en el ejemplo anterior, para buscar otros sitios tendríamos que desplazarnos por la página. Pero vivimos en un momento en el que la espera por una respuesta es cada vez más corta, un comportamiento que dio origen al término “búsquedas sin clics”.
Las respuestas generadas automáticamente en forma de textos con tono humano se deben a la tecnología de IA generativa. A diferencia de la IA tradicional, que solo analiza y clasifica datos, la generativa tiene la capacidad de crear textos, imágenes, videos, audios, códigos y mucho más.
Esto es posible gracias al aprendizaje automático, donde el robot “estudia” grandes volúmenes de datos y los transforma en el contenido que leemos, vemos y escuchamos. Cuando se inserta en el algoritmo de búsqueda, como es el caso de Google, esta tecnología utiliza una serie de algoritmos que ayudan a mejorar la precisión y relevancia de las respuestas, considerando también la intención de búsqueda del usuario.
¿En qué se diferencia de los snippets? Es cierto que los snippets también utilizan IA, pero no crean nuevos textos y respuestas elaboradas; simplemente destacan información que ya está escrita en la fuente encontrada por la IA.
Ahrefs analizó 300,000 palabras clave y encontró una reducción promedio del 34,5% en la CTR de la primera posición cuando aparecían los resúmenes de IA en los resultados de búsqueda.
Desde un enfoque positivo, además de que el resumen de IA mencione tu sitio como fuente, lo que ayuda a aumentar la autoridad del sitio, el usuario también puede hacer clic en la referencia citada y convertir más rápidamente que otros usuarios. Esto ocurre porque, al analizar la información disponible en internet, la IA selecciona aquellas que tienen mayor identificación con el usuario, realizando una especie de segmentación previa antes del clic.
Por lo tanto, aunque tu tráfico pueda ser menor, eso no significa que sea menos calificado. Por otro lado, si tu sitio no es citado por la IA, es esencial trabajar en estrategias para obtener esa mención o, al menos, mejorar su posición en los resultados.
Finalmente, llegamos a lo que más importa: ¿qué estrategias de optimización podemos utilizar para que un sitio no solo sea citado por la herramienta, sino que también genere tráfico orgánico? Bueno, muchas de las prácticas siguen siendo las mismas que ya conoces bien, pero invierte aún más en ellas.
Insertar la respuesta que el usuario busca de la manera más clara y directa posible, lo más rápido posible. Después de todo, uno de los principales criterios del resumen de IA es la relevancia. Esto no significa que tu texto deba limitarse solo a la pregunta.
Tratar temas y términos semánticos que complementen y enriquezcan el contenido. Esto también ayuda a que Google perciba que tienes dominio sobre el tema y puedes ofrecer una experiencia aún más completa para el usuario.
Trabajar más en la construcción de autoridad: crear clústeres de contenido y utilizar enlaces internos ayuda a la percepción de “propiedad” mencionada anteriormente. En otras palabras, enfócate en E-E-A-T más que nunca.
Estructura del contenido: el uso de H1, H2, H3, listas, puntos y menús puede darle más “toque de IA” a tu texto, pero es precisamente por eso que el resumen de IA lo entiende mejor, ya que lo ayuda a identificar las diferentes secciones. Además, es importante mantener las frases breves y los párrafos cortos.
Agregar marcadores de esquema: usa marcadores como FAQPage o HowTo para ayudar a Google a entender mejor la estructura de tu contenido.
Uso y creación de imágenes y videos agregan valor, especialmente para el algoritmo MUM.
Presta atención a la correcta indexación y el rendimiento de las páginas.
El link building también ayuda a la IA a seleccionar qué fuentes deben ser más destacadas. Si un sitio es citado con frecuencia en contextos relevantes, gana más credibilidad y tiende a ser más visible en los resultados.
Es interesante también utilizar menús desplegables al inicio del texto para que la IA pueda analizar rápidamente todos los temas que se tratarán a continuación.