Un breve resumen de la historia de Brasil

[Fotografía aérea de Río de Janeiro mostrando el Cristo Redentor] [La imagen muestra un cielo azul, la costa de Río de Janeiro y las montañas con bosques y la estatua del Cristo Redentor]

Cuando la mayoría de los extranjeros piensan en Brasil, automáticamente viene a su mente el clima cálido, la música alegre, la excelente comida y bebida, y las playas espectaculares. Y en la mayor parte del país, esto suena cierto. La historia de Brasil está marcada por una multitud de influencias de diferentes poblaciones y una mezcla de muchas nacionalidades, que hace que nuestro país sea único. Y este crisol es una de las razones por las que somos un país tan festivo.

Como dice la canción, somos un “país bendecido por Dios y hermoso por naturaleza”. Somos un país más grande que la mayoría, con una amplia variedad de climas, tradiciones, dialectos, gastronomías y paisajes. Y es en uno de estos lugares donde comenzamos nuestro breve resumen de la historia de Brasil: un lugar llamado Bahía, donde los portugueses llegaron por primera vez con sus carabelas en 1500.

[Desembarque de Cabral en Porto Seguro, óleo sobre lienzo, Oscar Pereira da Silva, 1904. Colección del Museo Histórico Nacional de Río de Janeiro.] [Esta es una imagen de la pintura de Oscar Pereira da Silva de las Carabelas que llegan a la costa de Porto Seguro . La imagen muestra un cielo azul, árboles y los indios debajo de ellos en la playa, viendo a las carabelas llegar a la orilla]

Los portugueses llegaron por primera vez a América en el siglo XV, en una región ahora conocida como Bahía, fundando la primera capital y ciudad del país, Salvador. Esta región está marcada por la gran influencia de la cultura, música y gastronomía africanas, mezclada con algunos aspectos derivados de los colonizadores europeos. Brasil es el resultado histórico de varias y distintas fases que han sucedido dentro de una delimitación geográfica específica. Primero vino la fase de conquista, cuando los portugueses pretendían conquistar la mayor cantidad de tierra posible, para enriquecerse y extraer los recursos posibles de la tierra.

Luego vino la fase de colonización, durante la cual las familias portuguesas que fueron perseguidas en Europa intentaron transformar la región en una versión de su tierra natal, explotando el territorio y desarrollando ciudades. El siglo XIX vio una fase del Imperio Portugués y la constitución de un Estado-nación, con la llegada de otras naciones a la región, sentando las bases de lo que hoy conocemos como brasileños. Y finalmente, la fase republicana de Brasil, que es lo que intentamos mantener hoy en día. A lo largo de la historia de Brasil, nuestros himnos, banderas, escudos, emblemas, consignas y todo lo que se refiere a nuestra identidad nacional, reflejan este recorrido paulatino, y los elementos de diferentes poblaciones (portuguesas, japonesas, alemanas, holandesas) que hacen nuestra población única.

El patriotismo significa apoyar una fase de nación, que puede divergir de otras fases que también están en construcción. Todas estas fases han afectado el desarrollo de nuestra nacionalidad, para bien o para mal. Y a pesar de toda la violencia sufrida a lo largo de los años, desde el genocidio indígena y la esclavitud hasta las dictaduras, los brasileños han seguido siendo un pueblo cálido, receptivo y alegre.

La historia de Brasil está marcada por peculiaridades que hacen que el país sea único y que vale la pena destacar.

Brasil recibió su nombre de un árbol. Uno de los muchos tipos de vegetación de la región, la “paubrasilia” o palo de Brasil, es un símbolo muy conocido de la Mata Atlántica, y su explotación fue la primera actividad económica realizada por los portugueses. El árbol era importante para los portugueses por su madera, que podía usarse en la construcción de numerosos objetos como muebles y cajas, pero principalmente porque la resina de madera se usaba para teñir telas. Pero antes de que llegaran los colonizadores, Brasil era conocido por sus habitantes nativos como Pindorama.
Hay dos hipótesis en torno al origen de la palabra: o se deriva de la palabra tupí “pindó-rama” o “pindó-retama” (que significa “tierra / lugar / región de palmeras”); o proviene de la fusión de la palabra tupi “pin’dob” (“palmera”) con el sufijo “-orama” (“espectáculo”) – que significa, por tanto, “espectáculo de palmeras”

[La imagen muestra un cielo azul con algunas nubes y palmeras altas]

La historia de Brasil está marcada por varias delimitaciones geográficas y conflictos internos por la integración y emancipación de determinadas regiones. Si echamos un vistazo a los mapas de la región a lo largo del tiempo, vemos que muchas regiones que hoy conocemos como estados independientes no lo fueron hasta hace poco. Debido al proceso de colonización, los brasileños fueron testigos de muchas revoluciones separatistas que tuvieron lugar en diferentes partes del país, por razones religiosas, políticas, culturales o económicas. La Inconfidência Mineira (1789) pidió la secesión del Estado de Minas Gerais del resto de Brasil.

La Sabinada (1837) fue una revuelta que buscaba la independencia de la región de Bahía. La Revolução Farroupilha separó la región sur de Brasil del resto del país durante diez años, entre 1835-1845. Todas estas guerras internas estuvieron marcadas por períodos de declive económico e inestabilidad política, características que continúan hasta nuestros días. Para evitar que la historia se repita, el primer artículo de la constitución brasileña de 1988 establece que la República Federativa de Brasil está “formada por la unión indisoluble de los Estados y Municipios, y el Distrito Federal”, volviendo inconstitucional cualquier movimiento cuyo fin (directo o indirecto) es la disolución del estado brasileño.

La Semana de Arte Moderno de 1922 fue un hito en la historia de Brasil. El evento sacó a la luz una nueva mirada sobre los procesos artísticos, así como la presentación del arte considerado “más brasileño”. Una ruptura con el arte académico condujo a una revolución estética y al advenimiento del Movimiento Modernista de Brasil. Esto abrió la puerta a una mayor libertad en materia de producción e investigación estética en el país, contribuyendo a una importante progresión intelectual y artística. Los artistas que presentaron sus obras de poesía, música, arquitectura, escultura y pintura a la sociedad fueron muy criticados por su actitud innovadora.

Después de la Semana del Arte Moderno, considerada uno de los hitos más importantes de la historia cultural de Brasil, se lanzaron numerosas revistas, movimientos y manifiestos. También vale la pena mencionar otros desarrollos culturales que se inspiraron en las ideas de los modernistas, como el Tropicalismo y la generación Lira Paulistana de la década de 1970, e incluso el Bossa Nova.

[O homem amarelo, por Anita Malfatti. Reproducción fotográfica por Romulo Fialdini] [pintura de un hombre usando un traje y corbata, sentado y mirando a la izquierda]

A lo largo de la historia de Brasil, la región ha tenido tres capitales diferentes. La primera, como se mencionó anteriormente, fue Salvador, en la región Nordeste de Brasil. Primera ciudad del país, siguió siendo la capital de la nación de 1549 a 1763, ya que la Región Nordeste fue responsable de la mayor extracción de Pau Brasil, además de ser el primer productor de azúcar, principal motor económico en ese momento. Además, la ubicación de Salvador facilitó la exportación de estos productos. Luego, cuando se descubrió oro en la parte sur de Brasil, la capital se trasladó a Río de Janeiro, que se convirtió en la base de todo el imperio portugués, ansioso por estar más cerca de las minas de oro.

Río siguió siendo la capital del país hasta la década de 1960, lo que puede explicar porqué Río es la ciudad brasileña más famosa en la actualidad. Pero un proyecto nacional que se inició en el siglo XIX pretendía situar la capital del país en su región central. Y así, en 1957 se inició la construcción de Brasilia. Fueron necesarios tres años para completar la mayoría de los edificios que hoy albergan el congreso nacional. El objetivo era desarrollar la región y permanecer “en medio de todo”. El diseño arquitectónico de Brasilia fue supervisado por Oscar Niemeyer, uno de los más grandes arquitectos del país.

La construcción de Brasilia fue la pieza central simbólica del proyecto de desarrollo económico de Brasil, que buscaba invertir fuertemente en áreas estratégicas. Este proyecto fue parte de una visión de un nuevo Brasil en ese momento.

[Congresso Nacional Cidade de Brasília, Autor Espartaco Madureira Coelho – fotografía de dominio público] [La imagen muestra un cielo azul con algunas nubes, y los edificios blancos del Congreso Nacional en Brasil, diseñado por Oscar Niemeyer]

La historia de Brasil es ciertamente compleja e interesante, y sin duda hay muchas más curiosidades para que las discutamos con mayor detalle. Cada evento que tuvo lugar durante el desarrollo del país ha contribuido a hacer del pueblo brasileño una sociedad única, feliz y decidida.

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